“Esto es como comer en un restaurante de dos estrellas o hacerlo en uno de barrio de calidad, en los dos comerás bien, pero la diferencia será de 200 euros”, así ejemplariza Alberto Sanvicens la famosa cuesta de septiembre que viven las familias cuando tienen que enfrentarse a la vuelta al colegio. Mañana, Castilla y León abre sus aulas para el regreso al curso escolar 2021-22 y es el momento de hacer números. Unos cálculos que son más detallados si, como en el caso de este matrimonio burgalés formado por Alberto y Gema, tiene seis hijos de 19, 17, 16, 14, 12, y 10 años. Todos ellos cubren todas las parcelas del sistema educativo. Desde Universidad hasta Educación Primaria. Así es cómo la familia Sanvicens-Catalina se prepara para afrontar lo que viene y ofrece todos los detalles a El Español Castilla y León.   

Material escolar, libros, ropa, transporte escolar…suma y sigue. Ahora bien, para Sanvicens, “si te lo montas bien, no es tan caro el regreso”. Lejos de lo que se pueda pensar, para el presidente de la Federación Regional de Familias Numerosas: “La gente se cree que las familias numerosas tenemos un gasto hiper mega desorbitado a nivel de colegios, y claro que lo puedes tener si vas a ‘full equip’, pero si lo haces con cabeza y sentido común, la cosa no es para tanto”.

 Este padre burgalés también tiene claro que algunos datos se “exageran” y culpa a la sociedad que “te hace gastar y comprar porque si no, no eres nadie”. Una estadística dice que cada niño castellano y leonés cuesta a sus padres 1.400 euros. “No es verdad. Claro que habrá padres que lo paguen, pero está claro que será porque no ha mirado por la economía familiar”, matiza.

Alberto recuerda que con el paso del tiempo los gastos han disminuido. “Hace un par de años el mes de septiembre era de locos. En los colegios no se mantenían los libros, llegaba la editorial y te cambiaban los libros. Los uniformes era una locura, un uniforme para cada uno, aunque en este caso la ventaja de las Familias Numerosas es que pueden pasar de unos a otros”, explica.

Los trucos para estar más desahogados

La familia burgalesa tiene una serie de trucos para sobrellevar mejor los gastos de este mes de septiembre. Por ejemplo, cuenta con becas para los dos hijos mayores. Unas ayudas que oscilan entre los 1.200 euros por curso, dependiendo del expediente académico y del número  de hijos. “Así podemos estar más desahogados”.

El presidente de la Asociación burgalesa agradece algunas medidas que se han tomado desde la Junta. Por ejemplo, el programa Releo, donde te entregan los libros de cada curso y luego los devuelves.

Otro consejo para llegar “bien” a fin de mes es usar las páginas de compra y venta de Internet para buscar o vender lo que ya no necesitamos, “suele salir barato”. Aunque Sanvicens insiste en que el mayor consejo es no dejarse devorar por el consumismo. “Todos necesitamos zapatillas y ropa, pero no tienen que ser de marca, de los más caros y de los que usan los famosos”.

El mayor gasto en material escolar

El gasto mayor de las familias se va en el material escolar. Aquí es donde el padre se muestra más crítico. “Me parece una vergüenza que cada profesor pida una libreta o un cuaderno diferente. Uno de pasta dura, para matemáticas un archivador con anillas, para Ciencias, un rotulador de la marca X. Estos detalles son los que rompen la economía, sobre todo en los cursos de Primaria, que es donde más tontería hay”, critica. Alberto prefiere los libros a las tablets, entre otras cosas porque “nos quejamos de que están todo el día con el aparatito en casa y luego en clase pasan más horas”.

200 euros por hijo

Las cuentas de la familia burgalesa salen en 200 euros por cada hijo, por lo que “no hay que asustarse con las familias numerosas, lo que hay que tener es un poco de cabeza”. Sanvicens destaca que en su casa solo entra un sueldo de un vendedor de maquinaría agrícola. Aunque en este momento se acuerda de otras familias numerosas que sí lo están pasando mal. “El paro y los ERTEs están haciendo mucho año, y en ese caso sí es complicado”.

Pasado el mes de septiembre, el de la cuesta, desde la Federación Regional se hace fuerza en buscar soluciones a otros problemas. La conciliación, por ejemplo, los múltiples deberes provocan más deberes que cuadras la cuentas. El transporte escolar, las familias numerosas en el medio rural o, por ejemplo, las ayudas a los colegios concertados para los comedores. “Nos dicen que si tenemos para ir a un colegio concertado también para comer”, lamenta.