Las personas que comparten piso en España tienen un perfil similar al que tenían el año pasado, aunque la edad media ha vuelto a subir hasta los 33 años: viven en el centro de las grandes ciudades, no fuman ni permiten que se fume en la vivienda y no tienen ni admiten mascota. En la mayoría de los pisos compartidos conviven hombres y mujeres (69 por ciento), mientras que el 26 sólo tiene habitantes femeninas y el cuatro por ciento, solo compañeros masculinos.

La edad media de los habitantes de un piso compartido varía en función de la zona geográfica en España, aunque en Castilla y León todas las provincias se asemejan. Así, oscila entre los 29 años de Salamanca, ciudad eminentemente universitaria, y los 34 de Palencia. El resto se encuentran entre medias: con 33, Ávila y León; con 31, Burgos y Valladolid, y con 30, Segovia. En todo caos, lejos de los 36 años de ciudades como Palma de Mallorca, Guadalajara, Albacete, Gerona y Vitoria.