Esta línea de subvenciones directas tiene por finalidad financiar los costes derivados de la contratación temporal por parte de los ayuntamientos de la provincia de trabajadores desempleados e inscritos como demandantes de empleo no ocupados en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León, con una cuantía máxima por trabajador y día de 61,83 euros a jornada completa, o la parte proporcional al número de horas contratadas.

La distribución de los fondos se lleva a cabo con arreglo a criterios de población. Así, los ayuntamientos de hasta 250 habitantes percibirán 18.062 euros; de 251 a 500, 19.622 euros; de 501 a 1.000 habitantes, 24.362 euros; de 1.001 a 3.000, 20.678 euros; de 3.001 a 5.000, 28.337 euros, y los de 5.001 a 20.000 habitantes, 34.937 euros.

Desde que el pasado 11 de marzo se publicaran en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) las bases reguladoras para la concesión de estas ayudas se abría un plazo de 20 días hábiles, que finalizó el 12 de abril, para la presentación de solicitudes, trámite que todos los ayuntamientos de la provincia llamados a ser beneficiarios, los 208 de menos de 20.000 habitantes, cumplimentó en tiempo y forma. La resolución de estas ayudas se aprobaba en la última comisión de Cooperación y tendrá que ser ratificada en el próximo pleno, previsto el miércoles, informan desde la institución provincial.

El vicepresidente y diputado de Cooperación y Servicio de Asistencia a Municipios, SAM, Matías Llorente, recalcó que este plan “es uno de los más importantes, pues nos permite a los pequeños ayuntamientos tener personal contratado a lo largo de todo el verano para cubrir las necesidades de estos meses, pero también, y sobre todo, dar trabajo a esas personas que se han quedado sin empleo en este contexto de crisis sanitaria, económica y social”. 

Llorente insistió en que, si bien es necesario mantener la estructura de los pueblos de la provincia, “también lo es dar trabajo a los vecinos que en este momento lo necesitan”.

La Diputación de León mantenía en esta convocatoria la dotación de 4,5 millones de euros después de que el pasado año, dentro del plan de choque diseñado en el contexto de la crisis derivada por el COVID, incrementara la previsión de tres millones. De este modo, los tres millones que se consignaron en el presupuesto de 2021 siguiendo la línea de las cuentas anteriores, se suplementaron con otro millón y medio más de los remanentes de tesorería.

Llorente recalcó que este plan “tiene efectos retroactivos” y está destinado a cubrir los gastos de contratación de personal por parte de los ayuntamientos desde el pasado 1 de enero hasta el 30 de septiembre.