Según su cuarta y quinta acepción en la RAE, un cómico no es sólo alguien que hace reír, sino, además, alguien que escribía comedias o un comediante, un actor. Es a ellos a quienes se dirige ‘Cómicos, a donde el viento nos lleve’, la obra de Morfeo Teatro con la que la compañía volverá a subir a las tablas del Teatro Juan Bravo de la Diputación de Segovia, apenas medio año después de interpretar sobre ellas ‘La sumisión y el porvenir está en los huevos’, y con la que intenta homenajear el oficio de los cómicos itinerantes, una profesión, en parte, denostada o equivocada por el tiempo.

El texto, escrito por Miguel Murillo y Francisco Negro y dirigido e interpretado por éste, a quien acompaña sobre el escenario Mayte Bona, rinde pleitesía a los autores populares del Siglo de Oro, a las compañías teatrales de la Ilustración española o a las compañías de repertorio de finales del siglo XX, a través de piezas, romances y fábulas que proceden desde el siglo XVII hasta el XX.

Para ello, a partir de las 19:30 horas de mañana sábado, 29 de mayo, Negro y Bona se transformarán en don Pinto Cruceiro y doña Sota de Bastos, quienes se presentarán ante los espectadores segovianos para representar un repertorio de romances, fábulas y burlas, al más puro estilo de sus antepasados sobre las tablas, que les llevará, al mismo tiempo, a hacer una introspección de su propio oficio; una profesión que, para la gran mayoría, es más un viaje errante en el que vida y teatro muchas veces confunden su papel.

La risa, la emoción y la lucidez son los principales aliados de Pinto y Sota, quienes, como buenos cómicos, encuentran en la carcajada y el humor las mejores armas para enfrentarse al patetismo y la miseria que brinda una profesión tan agradecida para el alma como desgraciada con el bolsillo. Así, el montaje, no deja de hurgar en el pasado de la escena para realizar una crítica de un presente en el que las condiciones no han mejorado para los intérpretes y en el que las compañías están quebrando por falta de recursos y también por la falta de confianza en su trabajo y sus proyectos.

Para Morfeo Teatro, que ya hizo reír a carcajadas al Juan Bravo con su versión y su extravagante propuesta escénica del texto de Ionesco, la existencia de ‘Cómicos, a donde el viento nos lleve’ se sustenta en un simple y sincero: “porque el mundo es un asco y la gente quiere reírse”. Las entradas, para aquellos segovianos que lo piensen y deseen reírse de verdad, están disponibles tanto en taquilla como en Tickentradas por 12 euros.