Castilla y León

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El campo

Las DO de vinos afrontan 2021 con "optimismo" a la espera de que la hostelería recupere el pulso

25 abril, 2021 13:53

Los consejos reguladores de las denominaciones de origen Ribera del Duero, Rueda, Cigales y Toro afrontan este 2021 con optimismo moderado y a la espera de que el canal Horeca recupere su pulso. El presidente del Consejo de la DO Ribera del Duero, Enrique Pascual, apunta a que en los tres primeros meses del año se ha producido un ligero crecimiento de las ventas, en concreto, un dos por ciento con respecto al mismo período del año anterior en el que no se había declarado la pandemia.  

El sector, en su opinión, está “luchando e intentando afrontar los envites de la COVID-19” y reconoce que el 95 por ciento de las bodegas de la marca están afectadas por la situación de merma en las ventas. La entrega de contraetiquetas a las bodegas cayó en 2020 un 11,9 por ciento, hasta un total de 73,89 millones de unidades.  

“Algunas pocas bodegas crecieron el pasado año, sobre todo las que venden a través de la alimentación, pero muchas han sufrido, por lo que buscamos una situación más regular”, razona.

El excedente del vino Ribera del Duero de 2020 se encuentra en las bodegas en situación de almacenamiento, según Enrique Pascual, quien apostilla que, a pesar de que el pasado año el consumo interno de Ribera del Duero disminuyó, las exportaciones se mantuvieron “bastante bien”. “Las bodegas que tienen renombre tienen una base importante de negocio pero las que trabajan con el canal Horeca han sufrido”.  

Ribera del Duero comercializa principalmente a la restauración de primer nivel, y el hecho de los continuos cierres y aperturas limitadas han hecho que la evolución de las ventas acumule o negativos o subidas mínimas.  Apostilla que las ventas ‘on line’ aunque son bienvenidas no dejan de “ser lo que son”, y reitera que es el canal Horeca el “punto fuerte de las ventas”.

En el campo sigue el trabajo de cara a la próxima campaña, que en principio pinta “buena”, aunque es pronto para augurar su evolución. Las heladas a finales de abril o el granizo son los grandes enemigos que podrían dar al traste con las buenas previsiones de vendimia que se mantienen con “cautela”.  

Asimismo, Pascual matiza que, a pesar de la crisis, los proyectos de creación de nuevas bodegas bajo el amparo del Consejo Regulador no se han parado, aunque matiza, que hasta que no proceden a su inscripción, no puede corroborar este hecho con firmeza.  

Más optimista con respecto a la recuperación del sector se expresa a Ical, el director general de la DO Rueda, Santiago Moro, quien apunta a que si bien enero y febrero fueron malos meses para las 74 bodegas que componen la denominación, en marzo se registró una recuperación importante, es más, se batió el récord con la entrega de 10,3 millones de contraetiquetas del Consejo a las bodegas, frente a los ocho millones de un mes de marzo “sin pandemia”.  

El pasado año la DO Rueda cerró el ejercicio con una bajada del diez por ciento, a pesar de que el consumo de vino en España cayó un 20 por ciento. Además exportó 12,91 millones de botellas en 2020, lo que supuso un 15,54 por ciento de sus ventas. Los vinos de Rueda lograron cifras históricas de exportaciones en varios países, como Holanda y Alemania, dos mercados prioritarios para la Denominación de Origen.  

“Las exportaciones el pasado año aumentaron un 3,5 por ciento, fue el segundo mejor año de las serie histórica en exportaciones. De alguna forma las exportaciones compensaron la desaparición del canal Horeca”, explica el director.  

Santiago Moro avanza que los buenos resultados del mes de marzo hacen presagiar la recuperación paulatina del sector y de la DO Rueda en particular, a pesar de que todavía “se encuentran sin agenda”, es decir, que no tienen una idea clara del funcionamiento de la demanda.  

Confía, no obstante, que la vacunación y la bajada de la incidencia lleve a la pandemia a una situación de “nueva normalidad”, ya que esto conllevará, sin duda, en la recuperación de las ventas.

Respecto al excedente de Rueda 2020, el director general corroboró que “está almacenado”, y reconoce que, al ser vino joven, necesita “salida”. “No tiene mucho margen de almacenamiento, por lo que creemos que la recuperación está a punto de llegar y podremos vender Rueda en España y el resto del mundo”.

Por último, aseguró que el sector hostelero es el “gran socio” de la DO Rueda, y consideró que es el pagano de las crisis sanitaria. 

Cigales y Toro

El presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Cigales, Julio Vallés, reconoce que, de momento, los bodegueros arrastran la crisis provocada por el COVID-19, y no repuntan las ventas porque “no hay donde vender”. Es más afirma que hasta que el canal Horeca no se “normalice” sufrirán el parón en las ventas. 

Vallés aseguró que, a pesar de que la cosecha 2020 fue “magnífica en cantidad y calidad”, el comportamiento de la demanda este primer trimestre del año ha sido peor que el año pasado, debido a que entonces no había pandemia. “Cuando empezó el confinamiento hay había salido una parte importante de nuestros vinos, sobre todo, de los rosados”, detalla.

El descenso de ventas de la DO Cigales fue importante pues alcanzó un 12 por ciento, la misma cifra que se registra en este primer trimestre con respecto al mismo período del año pasado.  

Las cifras no son, según Vallés, “catastróficas, pero tampoco buenas”, ya que la DO estaba inmersa en un crecimiento y se ha quedado interrumpida.  

A pesar de la bajada de las ventas, la DO Cigales ha apostado, durante el parón, para mejorar en exportación y en la venta en grandes superficies, y las cifras revelan que “ha mejorado un poco en valor relativo que no en absoluto”.

Vallés reconoce que el principal consumidor de sus vinos de calidad es la provincia de Valladolid, a pesar de que la DO ha conseguido introducirse en Andalucía y el Levante. Sus exportaciones se limitan a países del centro de Europa.  El presidente de la DO espera que la cosecha de este 2021 sea tan buena como la del año pasado, que alcanzó las 8.200 toneladas. 

Echa un capote al sector de la hostelería, del que asegura, es el “pagano de la crisis” , y precisa, que en su opinión, los bares no son el principal motivo por el cual la pandemia se extiende. “No se entiende que yo no pueda beber un vino en el interior de un bar de Valladolid pero sí pueda ir a Herrera del Duero a hacerlo. No obstante creo que las autoridades sanitarias deben exigir el máximo cuidado y que se ventile de forma constante los interiores, es más, deberían obligar a instalar medidores de CO2 para que los interiores de los restaurantes sean igual de seguros que las terrazas”, explica para señalar que la ciudadanía también tiene una “cuota de responsabilidad” en la expansión de la pandemia.  

Felipe Nalda, presidente de la Denominación de Origen Toro, se muestra optimista con respecto al futuro de las 64 bodegas a corto plazo, y recalca que soportan una reducción en las ventas de un ocho por ciento en el primer trimestre del año, no obstante, si se comparan los datos del 15 de abril de 2020 y del 15 de abril de 2021 se produce un crecimiento del 15 por ciento.  

“Toro mantiene sus ventas gracias a la internacionalización de sus vinos y su consolidación en grandes superficies”, destaca, para reseñar que de las 13 Denominaciones de Origen de Castilla y León, la de Toro fue la única que tuvo un crecimiento del dos por ciento el pasado año, debido a la diversificación de las ventas a través de diversos canales.  

A pesar de que es optimista, no deja de reconocer que algunas bodegas lo han tenido “más fácil que otras”, ya que las familiares con la campaña de Navidad “resistieron” y otras, dependientes del canal Horeca, “las han pasado canutas”.  

“Son las bodegas que tenemos más facilidad para ofertar los vinos a grandes cadenas de alimentación o a la exportación las que salvamos los muebles. Toro es optimistas respeto al cierre del año anterior”.