La semifinal de MasterChef Junior 8 dejo momentos especiales y carcajadas varias este martes con Javier, una noche más, como protagonista y con la presencia también de su abuelo Ambrosio en las cocinas del concurso gastronómico por excelencia en nuestro país.

El vallisoletano cocinó con su abuelo unas sopas de ajo que recibieron cuatro puntos en la primera prueba de este quinto programa de la octava edición del concurso.

En la prueba de exteriores, y en un marco incomparable como el Museo de Altamira, Javier se centró, por fin, en una prueba grupal para competir con Manel y Nicolás y cocinar láminas de bisonte y lomo de ciervo, vencer y conseguir 6 puntos más, intentando además ordeñar a una cabra, en algo que no se le dio muy bien.

El pucelano llegaba a la prueba de expulsión con 10 puntos, con un pie casi en la final y volvió a cocinar, en esta ocasión con la ayuda de su amigo Jaime, un plato que consiguió sacar las buenas críticas del jurado y de un invitado muy especial.

Martín Berasategui calificó el plato de Javier de “brutal” e “increíble” y el vallisoletano consiguió meterse en la final del próximo martes donde buscará el premio compitiendo con Aurora, Nicolás y Henar. Los expulsados de ayer fueron Manel, Adriana y Antony.

De nuevo Javier volvió a dejar momentos para el recuerdo y muchas risas y el martes competirá en la gran final del concurso.