Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han controlado la entrada y salida de 1.750 vehículos y 2.300 personas en la provincia de Zamora, para evitar la entrada o salida irregular, durante el cierre perimetral decretado por la Junta de Castilla y León, como medida para frenar el avance del coronavirus. Un seguimiento que ha dado como resultado el intento, por parte de 23 personas, de entrar en la provincia, pese a la prohibición sanitaria aún activa.

Así lo ha relatado el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco durante el repaso semanal a dichos controles, donde ha indicado que, en esta semana, dichos controles se han focalizado en los accesos por autobús o tren en la provincia, y donde se han detectado mayor número de usuarios intentando saltarse este cierre perimetral de obligado cumplimiento. Un aumento de hasta trece personas, con respecto a la semana pasada, que "no preocupa" demasiado a la Subdelegación del Gobierno en Zamora, pero que continuarán controlando con atención. 

Mientras, las denuncias emitidas por el incumplimiento del toque de queda se han duplicado en la última semana, de tan solo quince hasta las 33 totales. 

Por otro lado, el subdelegado del Gobierno ha destacado el "estricto" cumplimiento de las cuarentenas en la provincia. Y es que, de las 250 personas que han sido controladas en Zamora, solo dos habían incumplido su confinamiento domiciliario obligatorio.