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Salamanca

Denuncian la aparición "constante" de brotes en Majorel y su ocultación para "no tener que parar la producción"

19 noviembre, 2020 09:07

La Juventud Comunista y el Partido Comunista de Salamanca ha denunciado la situación de Majorel, el centro de trabajo más grande de la capital charra con casi 2.000 trabajadores. 

Según comentan, trabajar allí supone una "actividad de alto riesgo debido a la aparición constante de brotes de Covid-19 que se han ido sucediendo hasta afectar a departamentos casi completos". Además, se quejan de que la empresa oculta estos positivos a la plantilla para no tener que parar la producción.

Los motivos de estos positivos, dicen, son varios, como la "ausencia de ventilación, la imposibilidad de mantener la distancia de seguridad en algunos espacios del edificio, el personal insuficiente para llevar a cabo tareas como medir la temperatura a los trabajadores o controlar los accesos escalonados, la escasez de dispensadores de gel e incluso una prevención de riesgos laborales basada en medidas que se escapan por completo de las competencias del trabajador, como mantener la distancia de seguridad en el transporte público".

Sin embargo, el problema va más allá. Y es que ponen la vista también en la tasa de temporalidad que existe entre la juventud, "lo que supone que muchas veces tiene que acudir al centro de trabajo, aún presentando síntomas compatibles con el coronavirus, para mantener altas tasas de productividad y así lograr que se les renueve", o incluso salarios bajos que provocan que no puedan quedarse en casa. 

"Los jóvenes llevamos aguantando meses que se nos criminalice, que se tome a unos pocos irresponsables como el paradigma, que se nos diga que vamos a matar a nuestros familiares y que el principal problema está en las reuniones sociales, cuando casi un 70% de los brotes se dan en el trabajo, más cuando son los trabajos precarios a los que normalmente podemos acceder".


Por eso denuncian una vez más que, "mientras nos encontramos confinados para vivir, sin poder ver a familiares ni amigos, sin poder disfrutar de nuestro ocio, ni siquiera cuando es sano como los gimnasios, se nos hacina para producir y se ponen los beneficios empresariales por encima de nuestra salud y la de nuestras familias".