La Junta de Castilla y León ha confirmado en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno que Salamanca será confinada tras el aumento de contagios de COVID en las últimas fechas. De esta forma se unirá a otras capitales de provincia como León y Palencia, así como a otras localidades donde ya se han decretado duras medidas a lo largo y ancho de Castilla y León.

Después de que se adoptaran medidas restrictivas hace apenas un mes pero que afectaban principalmente a los aforos, en esta ocasión estas serán más duras, de manera que la movilidad quedará circunscrita a la ciudad, no pudiendo desplazarse fuera o dentro de sus límites salvo causa justificada. 

Además, con toda probabilidad la norma traerá consigo, como ya ha ocurrido en otras capitales y municipios, una reducción en el horario de cierre de los establecimientos hosteleros, de manera que si actualmente era a la 1 de la madrugada, no pudiendo aceptar clientes desde la medianoche, el cierre será a las 23 horas, también sin poder servir desde una hora antes. 

Según ha expresado la consejera de Sanidad, Verónica Casado, la incidencia acumulada en Salamanca ha superado ya los 500 por 100.000 habitantes por lo que, cumpliendo también con las otras dos características, las pruebas positivas por encima del 10% y las UCI de Castilla y León por encima del 35%, comenzará el confinamiento con las limitaciones de movilidad. Será desde la medianoche del viernes al sábado. 

Lo que no implicará, según anunció la consejera de Sanidad, es que la Universidad de Salamanca tenga que ofrecer las clases online por el momento. De esta manera, seguirá siendo presencial ya que el problema no se encuentra en las clases, sino en el entorno, según anunció Casado.