La Delegación Territorial de Segovia de la Junta de Castilla y León ha incoado un expediente sancionador a la 'Escuela taurina de El Espinar' por expedir carnés a alumno para becerradas, sin estar inscrita en registro oficial alguno.

Los hechos fueron denunciados en mayo de 2019 por la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA), tal y como desvela dicho colectivo a través de un comunicado recogido por Europa Press.

El expediente se ha iniciado, según manifiesta la Junta, "por presunta infracción en materia de espectáculos taurinos", en concreto, por cuanto los hechos denunciados por ANPBA "pueden ser constitutivos de una infracción administrativa de carácter grave", tipificada en el artículo 15, apartado o de la Ley de 1991 sobre potestades en materia taurina, a la que se remite el régimen sancionador del Reglamento taurino castellanoleonés de 2008, relativa al funcionamiento de las escuelas taurinas.

La Delegación Territorial de Segovia ha iniciado este expediente sancionador después de que, el pasado mes de julio, la Agencia de Protección Civil anulara "por no ser ajustada a derecho", una anterior resolución de la Delegación Territorial de Segovia que, en lugar de iniciar el expediente, archivó la denuncia de ANPBA contra la Escuela taurina de El Espinar.

La misma había otorgado carnés de alumno, en 2018, para las becerradas de El Espinar y San Rafael, sin estar legalmente habilitada, en esas fechas para hacerlo, al no encontrarse inscrita en ningún registro oficial, ni estatal ni autonómico, como determinó la propia Agencia de Protección Civil al estimar el recurso de ANPBA.

Quedó "acreditado que la Escuela Taurina no está reconocida ni inscrita en ningún Registro como tal escuela taurina", por lo que, sigue diciendo la Agencia, "cabe colegir que procedía la apertura de procedimiento sancionador al existir elementos suficientes que conduzcan a la presunta existencia de infracción".

Por otra parte, ANPBA ha solicitado al Ayuntamiento de El Espinar que deje de programar becerradas, "dado el creciente rechazo de una sociedad cada día más sensibilizada contra el maltrato animal y que observa con ojos críticos este tipo de entretenimientos".