La Junta de Castilla y León acaba de hacer público el Plan de medidas de prevención y control para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19 en la Comunidad de Castilla y León. En el decreta el cierre total de todas las peñas de la Comunidad, por considerarlas como "posibles focos de contagio".

La nueva normativa de la Junta considera que estos lugares llevan a "la relajación" de las medidas de prevención por parte de los asistentes. Por ello, ante las dificultades de seguimiento y control de las personas que participan en sus actividades, ante la posible declaración de un caso o brote en las mismas, decretan su cierre, a partir del 22 de agosto.

El Plan de medidas entiende por peñas, "cualquier local o instalación no destinada al uso habitual de vivienda, en la que se desarrollan actividades de recreo similares a las desarrolladas en establecimientos de ocio y entretenimiento, tales como consumo de alimentos y bebidas, actuaciones musicales, baile o análogas".