La pandemia del coronavirus ha hecho sufrir mucho a la población española. Dentro de ella, Salamanca ha registrado tasas muy importantes de contagios y fallecimientos, especialmente también porque las residencias de ancianos no pudieron salvar a un virus que se extendió rápidamente. 

Esto, unido a las dificultades para contabilizar los fallecimientos debido a la falta de pruebas y síntomas muy variados y, en algunos casos, parecidos a otras enfermedades, llevó al Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León a solicitar a los Juzgados de Registro Civil de Castilla y León los datos de fallecimientos certificados durante los meses de la pandemia más críticos. 

Así, en marzo y abril se contabilizaron 1.282 fallecimientos en Salamanca frente a los 545 de 2019, por ejemplo, en lo que, es cierto, fue un año de pocas muertes en estos meses. De los 1.282, los sospechos de haberlo hecho por coronavirus o ya con el test positivo eran 770, según los datos recabados por el TSJCyL. 

De esa diferencia de más de 700 fallecidos de un año a otro se ha pasado a solo ocho en mayo y junio. Según los datos de la misma fuente, en mayo hubo 299 fallecidos frente a los 264 de 2019, 35 más. De ellos, apenas 91 eran con Covid positivo o sospechosos del mismo. 

En junio, por su parte, los fallecidos fueron 242 frente a los 269 de 2019, 27 menos. De ellos, todavía 29 eran sospechosos de tener coronavirus o confirmados con él. 

Entre los dos meses, de esta manera, 541 fallecidos en 2020 por los 533 de 2019. Y de ellos, 75 tenían coronavirus y 45 eran sospechosos de poder tenerlo, por lo que 120 eran susceptibles de haber fallecido por ello, menos del 20% del total.