El coronavirus llegó mucho antes de lo que se pensaba a Castilla y León. Fue Soria, de hecho, la primera provincia que acogió a enfermos de coronavirus que fueron diagnosticados posteriormente. Así, según un informe del Instituto Carlos III basado en los datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, fue el 15 de enero cuando se dio el primer enfermo que posteriormente acabó siendo positivo. 

Esto supondría que, al menos en Castilla y León, el virus llevaba circulando dos meses antes de que se aplicara el estado de alarma debido a la crisis sanitaria. El problema existente por aquel entonces eran unos síntomas similares a la gripe, y solo en aquellos que presentaran algún tipo de sintomatología. Ello, unido a la poca información existente por las fechas provocó que no se localizara el virus hasta mucho tiempo después. 

Da la casualidad, además, de que este primer caso ha resultado en Soria, donde el estudio de seroprevalencia que se ha realizado en dos oleadas hasta la fecha ha marca como la provincia más afectada hasta el momento por el coronavirus. 

Tras Soria, le llegó el turno a Segovia, el 20 de enero; mientras que Palencia y Burgos tuvieron el primer caso diagnosticado posteriormente el 4 y 5 de febrero, respectivamente. Ávila y Salamanca fueron el 10, mientras que Valladolid y León, el 11 y el 13, según el citado estudio. La provincia más tardía en tener a alguien posteriormente dianosticado con el virus fue Zamora, el 28 de febrero.