La Ejecutiva Provincial del PSOE ha exigido que se abran los consultorios locales una vez que Valladolid ha pasado ya a la Fase 1 de la desescalada.

El PSOE, en un comunicado recogido por Europa Press, ha recordado que en ningún momento desde la declaración del estado de alarma la Junta de Castilla y León ha perdido la gestión de la atención sanitaria y social en la Comunidad, pero "todavía hoy se sigue hablando sobre la dirección sanitaria del Gobierno", según el secretario provincial socialista, Manuel Escarda.

"Pero hay que aclarar algo que debería ser obvio pero se quiere negar: la responsabilidad ha sido, es y seguirá siendo plenamente de las consejerías respectivas y del señor presidente, Alfonso Fernández Mañueco", ha afirmado Escarda, quien ha recordado que teniendo esto en cuenta la Atención Primaria ha sido protagonista.

"Las primeras víctimas sanitarias de la acción mórbida del coronavirus han sido, de hecho, profesionales de la Atención Primaria", ha apuntado el dirigente socialista, quien ha incidido mientras los desplazamientos dentro de la provincia se pueden realizar con normalidad los consultorios continúan cerrados y muchos de ellos llevan así tres meses.

"Ahí tenemos ejemplos como Viana, Aldea de San Miguel, Hornillos, Montemayor, Velliza, Valdenebro, Trigueros, Barcial de la Loma, Becilla de Valderaduey... y muchos otros están limitados a una exclusiva atencion telefónica", ha explicado.

A su juicio, la Atención Primaria de la región tiene que asumir la tarea del rastreo y seguimiento de nuevos casos de COVID-19 y de otras enfermedades como la cardiopatía isquémica, la hipertensión o la diabetes, los trastornos de la esfera psíquica, las enfermedades crónicas y la atención sanitaria a los internos de las residencias.

Según Manuel Escarda, "para este trabajo es necesario que los profesionales vuelvan a atender y abrir los Consultorios, los domicilios de los pacientes y la demanda de las residencias".

El Partido Socialista reclama que el Gobierno de la Junta de Castilla y León restablezca una sanidad pública "firme" y capaz de afrontar un nuevo rebrote de la pandemia y poder seguir atendiendo el resto de patologías y los cuidados precisos.

"Desde 2008 la reducción presupuestaria que trajeron los recortes del Gobierno del Partido Popular, la desregulación asistencial de las Residencias de la Tercera edad, la pretensión de quitar la obligatoriedad de disponer de médicos o enfermeras contratadas... no es de recibo. De aquellos polvos estos lodos", ha criticado Escarda.