El alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, ha insistido este lunes en la necesidad de afrontar la Fase 1 de desescalada "con ilusión y prudencia" para poder avanzar en el camino a la nueva normalidad.

Durante una comparecencia por videoconferencia, De la Rosa ha explicado que se pondrá en contacto con la consejera de Sanidad, Verónica Casado, para contrastar la situación de la ciudad y saber qué previsiones maneja la Junta de Castilla y León en lo referente a la evolución del virus.

Lo importante en todo caso, ha defendido, es controlar la pandemia y los posibles rebrotes a lo largo de todas las fases de la desescalada, a la vez que ha recalcado que Burgos está "suficientemente preparada" paraavanzar de fase. En relación a esto, ha remarcado el esfuerzo que a partir de ahora tendrá que hacer la Atención Primaria para detectar casos, aislarlos y así no poner en riesgo a la población con mayor vulnerabilidad.

El objetivo debe ser, tal y como ha aseverado, que la gente pueda salir a la calle sabiendo que no existen riesgos importantes. "Hay que minimizar el impacto", ha puntualizado.

Finalmente, ha explicado que el equipo de Gobierno local ha pactado una partida de 150.000 euros con el Grupo Ciudadanos para el reparto de unas 40.000 mascarillas higiénicas reutilizables entre los 37.000 burgaleses de más de 65 años con patologías crónicas.

De la Rosa, quien se ha mostrado de nuevo contrario al reparto indiscriminado de mascarillas, ha señalado que se trata de suplir la carencia de la Junta de Castilla y León en este sentido, si bien ha reiterado que debe ser esta administración la que asuma este reparto con garantías.