Ningún vecino recuerda nada comparable a lo ocurrido este nefasto 2020: un 9 de mayo sin Cristo. Con el corazón encogido, los vecinos de Morales del Vino se debaten hoy entre la tristeza y la emoción. A las 10 de la mañana, las campanas de la iglesia de la Asunción repicaban anunciando la festividad, y algunos vecinos se acercaban, tímidamente, movidos por una inevitable nostalgia para estar un poco más cerca de la venerada imagen, cuya réplica colocó hace unos días el párroco, Francisco Ortega, en la portada principal del templo. Un gesto que agradecen los moralinos, porque de esta forma sienten que el Cristo está con ellos, a pesar de no haber podido acudir a las novenas que comenzaban puntualmente el 1 de mayo, un peregrinar diario de alegría y devoción hasta la ermita del Cristo, a medio camino entre Morales y Zamora.

Aunque la imagen de la Virgen del Rosario ha sido trasladada a la ermita para la ocasión, no ha podido transitar los tres kilómetros que la separan del Cristo, como cada 9 de mayo, a hombros de los vecinos de Morales, a paso ligero y al son de la música alegre. Tampoco un nutrido grupo de autoridades la esperaban a las puertas de la ermita, en la que antaño era fiesta también para la capital zamorana y la romería más concurrida de la provincia. Ni la pradera se ha llenado de algarabía, ni de manteles tendidos en el suelo con tortilla, pimientos, chorizo, avellanas, rosquillas y hermandad. Ni los quintos de este año podrán despachar con generosidad la dulce limonada elaborada por ellos mismos en la caseta más frecuentada de todas. No se oirán las risas de los niños disfrutando de las atracciones en el largo paseo de puestos y casetas a la sombra de los chopos. 

Lo que sí quedará para el recuerdo es la emotiva misa con la que la Unidad Parroquial de Morales del Vino, en colaboración con el Ayuntamiento, ha retransmitido en directo para que llevar a cada hogar la celebración de esta festividad y el espíritu de la romería. No han faltado las flores para adornar el altar mayor, plagado de centros, a los pies del Cristo de Morales, ataviado con el paño de pureza bordado en 1887 que ha tenido puesto en "todos los momentos de epidemias a lo largo de la historia del siglo XX, hoy también en esta epidemia del siglo XXI", ha recordado el párroco, quien ha llamado a poner la mirada en Cristo Jesús con esperanza para salvar estos duros momentos. Palabras de aliento previas a la celebración de la Palabra de Dios y al rezo de la última novena, esta vez a través de las redes sociales, que a estas horas ya se ha hecho viral y cuenta con cerca de 2.000 visualizaciones.

Los vecinos han podido escuchar también la misa y novena desde sus casas, a través de los altavoces instalados en la iglesia. Y esta noche, a las 23 horas, también podrán cantar desde sus balcones la Salve, que tradicionalmente despide a la Virgen a su entrada de vuelva a la iglesia parroquial.

"#GRACIAS Ayuntamiento de Morales del Vino por hacer posible llegar a tanta gente este día tan especial, volviendo al corazón los recuerdos que nos unen en estos momentos. ¡VIVA EL CRISTO DE MORALES!", eran las palabras posteriores de la unidad parroquial alentando a los vecinos a mantener viva en sus corazones la fiesta más especial, y esperada, del Morales del Vino.

El vídeo puede verse en el siguiente enlace de la página de Facebook de la UAP Morales del Vino: https://www.facebook.com/UAPMoralesDelVino/videos/247194013301063/