La Junta de Castilla y León traslada hoy al Gobierno de España las ventajas de ordenar la estrategia de transición para la desescalada por zonas básicas de salud basándose en los datos de incidencia de la COVID-19. Una circunstancia que beneficiaba a siete zonas de la provincia de Zamora, pero que ayer daba un revés, perdiendo dos de ellas.

Según los últimos datos cargados en el Portal de Transparencia de la Junta de Castilla y León, las zonas básicas de salud de Corrales del Vino y Tábara 'se caen' de esta ansiada lista verde. La zona de Corrales ha sumado de golpe ocho nuevos positivos, mientras que Tábara contabiliza uno, que rompen la buena racha de ambas zonas. Aunque cabe recordar que pueden ser casos leves, que han podido ser detectados por Atención Primaria y que estén en sus casas pasando la cuarentena. 

Pese a esta nueva circunstancia, la consejera de Sanidad, Verónica Casado aseguraba que tanto el área básica de Corrales del Vino como la de Tábara se mantendrán dentro de la propuesta inicial de escalada en la provincia. La idea de la Consejería de Sanidad será el seguimiento de esos casos puntuales ocurridos en las últimas horas en estas dos zonas de la provincia, y se procederá a su aislamiento, para que no continúe el contagio, que eleve los malos datos y suponga un peligro a su buena racha habitual.