El Consejo de Gobierno ha acordado la adhesión de la Comunidad al Fondo de Facilidad Financiera que ha asignado a Castilla y León 291,38 millones de euros para cubrir las necesidades de endeudamiento correspondientes al segundo trimestre de 2020, tras considerar los potenciales beneficios que se pueden obtener en ahorro de intereses y al no ser necesaria la elaboración de un plan de ajuste.

Las condiciones financieras del préstamo se concretan en un plazo de 12 años (incluyendo cuatro años de carencia) y un tipo de interés equivalente al coste medio de la Deuda del Estado a un plazo equivalente.

Esta adhesión tiene como objetivo habilitar recursos financieros para atender las necesidades de liquidez del segundo trimestre de este ejercicio, en un contexto en que los mercados de deuda están fuertemente condicionados por la pandemia provocada por el COVID-19.

En julio de 2019, la Consejería de Economía y Hacienda solicitó la adhesión de Castilla y León al Fondo de Facilidad Financiera para cubrir las necesidades de endeudamiento para 2020, al cumplir la Comunidad los requisitos previstos en el Real Decreto-ley 17/2014, de 26 de diciembre, por el que se regulan las medidas de sostenibilidad financiera de las Comunidades Autónomas, esto es, respeto a las reglas fiscales y cumplimiento de los límites del periodo medio de pago a proveedores.

El 31 de enero de 2020, la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos acordó la distribución de los recursos del Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas para el primer trimestre del año, asignando a Castilla y León 224,46 millones de euros con cargo al Fondo de Facilidad Financiera. Por otra parte, el 20 de marzo de 2020, la Comisión asignó a la Comunidad 291,38 millones de euros correspondientes a las necesidades de endeudamiento del segundo trimestre del año, por lo que se suma un importe acumulado de 515,84 millones de euros.

Castilla y León cierra 2019 con un endeudamiento 3 puntos inferior a la media

Castilla y León ha reducido su nivel de endeudamiento al cierre de 2019 hasta el 20,8 % sobre el PIB, medio punto porcentual menos que en 2018 y casi 3 puntos inferior a la media autonómica. Este dato mantiene a la Comunidad como la octava autonomía más saneada del país, según los últimos datos publicados por el 

Banco de España el pasado 31 de marzo.

La aportación de Castilla y León al endeudamiento global de las autonomías españolas es limitada, de acuerdo con los datos facilitados por el organismo regulador. En concreto, al término de 2019 se cifraba en el 4,2 % del total de las comunidades autónomas.