El tramo de la desdoblada carretera N-122 en su entrada a Valladolid, a la altura del kilómetro 358,  es el más peligroso de toda España de la Red de Carreteras del Estado, con un índice de peligrosidad 423 veces superior a la media nacional, según un informe de la organización Automovilistas Europeos Asociados (AEA).

Es una de las conclusiones extraídas del referido informe tras analizar 190 kilómetros de carreteras convencionales y autovías localizados en 60 vías de 40 provincias españolas, cuyo índice de peligrosidad medio registrado en el quinquenio 2011-2015 ha sido como mínimo diez veces superior al de la media nacional.

España cuenta en la actualidad con una red de 166.003 kilómetros de carreteras, de los cuales 26.329 kilómetros están gestionados por la Administración Central (soportando el 51,2% del tráfico total de nuestro país); 71.324 kilómetros dependen de las comunidades autónomas (con el 43% del tráfico) y 68.349 de las diputaciones y cabildos (con el 5,8%).

Además, existen otros cerca de 489.698 kilómetros de carreteras interurbanas gestionadas por los ayuntamientos y otros organismos, a los que hay que añadir un vasto entramado de viarios y servidumbres que dan servicio a los 8.000 kilómetros de costa y los 130.000 de riberas fluviales.

De la totalidad de la red, 17.021 kilómetros son vías de gran capacidad (autopistas de peaje, libres y autovías y vías de doble calzada), siendo nuestro país el que dispone de una mayor longitud de este tipo de vías de toda la UE, seguido por Alemania con cerca de 13.000 kilómetros.