La Feria Rociera vistió ayer de colorido Valencia de Don Juan. Ataviados con sus trajes andaluces y caballistas, se celebró una romería hacia la iglesia parroquial desde el Jardín de los Patos. El cante, los volantes y la alegría fueron las notas predominantes de esta romería que ha culminado en el templo coyantino con una misa rociera cantada a cargo del Coro Rociero Ciudad de Asturias.

Tras la celebración religiosa la comitiva se trasladó al Jardín de los Patos donde la fiesta continuó toda la jornada. El entorno del castillo se transformó en el escenario idóneo para disfrutar de las sevillanas. Casetas de las 'hermandades' y un mercadillo de artesanías, complementos y otro tipo de productos completaron la Feria.

Una sabrosa paella fue el menú de la comida de hermandad que compartieron cientos de personas contagiadas por la alegría 'andaluza'.

El alcalde coyantino, Juan Martínez Majo, la concejala de Ferias, María Jesús Marinelli, y varios ediles más participaron en este evento que tiene como objeto compartir y disfrutar del espíritu y cultura andaluza en un animado día de fiesta organizado por el Ayuntamiento en colaboración con el Grupo Palazuelo.

Las actividades continuaron con la actuación del Coro Rociero Ciudad de Asturias y el grupo Alma Flamenca. Además, se celebró la tercera edición del Concurso de Sevillanas Ciudad de Coyanza.

El broche de oro de la jornada lo puso el cante y el baile con los grupos Ajoli y Alma Flamenca que actuaron en el auditorio a las 23:00 horas.