Unanimidad en el pleno del Ayuntamiento de Valladolid para rechazar la violencia en el deporte, al aprobar una moción presentada por el PP y que ha contado con el respaldo de todos los grupos. La concejala del grupo popular, Mayte Martínez, ha defendido la moción en la que se recoge que la Fundación Municipal de Deportes desarrolle un código ético para erradicar las conductas violentas, que podrían suponer a clubes o entidades deportivas la retirada de las subvenciones municipales.

El concejal de Deportes, Alberto Bustos, ha señalado que en Valladolid “por suerte no hay problemas excesivos en este tema, pero debemos estar atentos ante cualquier tipo de manifestación violenta para mantener la defensa de los valores del deporte, como la solidaridad y el compañerismo, apostando por el deporte base, que está convirtiendo Valladolid en una fiesta cada fin de semana”.

La moción también plantea que se instalarán pancartas o carteles en las instalaciones deportivas contra la violencia en el deporte, así como la creación de un premio al juego limpio para el club o deportista que destaque por su comportamiento ejemplar.

Sobre la expulsión de las instalaciones deportivas a las personas cuyo comportamiento sea violento, Toma la Palabra ha incorporado una enmienda para “estudiar los mecanismos legales adecuados para limitar el uso o prohibir el acceso a instalaciones deportivas en estos casos”.

También ha salido adelante una enmienda presentada por Sí se Puede para incentivar el empadronamiento en la ciudad. La portavoz de Sí se Puede, Charo Chávez, ha argumentado que la intención “no es la de plantear un plan completo que es responsabilidad del Gobierno municipal, solo aportar una pequeña acción, como la creación de una tarjeta ciudadana única para empadronados, o como también quiere aportar en este sentido el plan de retorno del talento” y ha precisado que estas acciones también se pueden dirigir “en positivo a las personas que viven fuera de Valladolid pero siguen trabajando en la ciudad y disfrutando de buena parte de los servicios”.

La portavoz de Ciudadanos, Pilar Vicente, ha reclamado al equipo Gobierno “un plan ambicioso para frenar la perdida de población, porque la gente no se va a empadronar en Valladolid por una tarjeta ciudadana, hacen falta más acciones para frenar la dinámica de los últimos años”.

El concejal del PP,  Carlos Fernández, ha argumentado que “se ha producido un trasvase de población de la capital a su entorno, que ha bajado la población en la ciudad pero no en el área metropolitana” y para frenar esa tendencia ha propuesto “bajar impuestos, aumentar la inversión en la ciudad y aumentar la bonificación fiscal a los empadronados”.

Además, Fernández ha planteado que se plantee al Sacyl la posibilidad de pedir el empadronamiento cuando se hace la tarjeta sanitaria, “para que no haya gente que esté empadronada en otras localidades pero tenga los servicios sanitarios en la capital”, una cuestión que ha quedado pendiente de estudio para una posterior propuesta en otra sesión.