Este sábado la Granja de Moreruela acogía un año más y como manda la tradición la Copa Zamora. Un campeonato que consigue aunar a prácticamente todos los clubes de la provincia, 28 participantes de los 38 existentes, y que como manifestaron en su presentación, agrupa una caza muy selectiva, en la que se cuida tanto a liebres como a galgos.

Tras una dura jornada la que vivieron los galgueros de la provincia ayer, las largas horas merecieron la pena. Las dos finalistas, Sobrina del club Virgen de La Veguilla, y Paula del club Duero zamorano, mostraron sus mejores dotes y junto a la gran calidad de las liebres compensaron las largas horas de caminata y espera de los galgueros zamoranos.

El primer punto fue para Paula, la galga benaventana que realizó una buena salida mantuvo durante varios minutos de la carrera a la galga blanca Sobrina muy cerca, pero al final, Paula se llevaba este primer punto. En la segunda carrera, la galga Sobrina amenazaba con hacerse con la victoria del campeonato y consiguió su primer punto. Tras ello, llegaría la carrera por excelencia, una liebre de cuatro minutos en la que Sobrina se creció y logró remontar a la galga del Club Duero que abandonó a la liebre tras la gran intensidad y duración de esta.

Una liebre de las que gusta ver y más en un campeonato como estos que dejó satisfechos a los galgueros de la provincia.

En cuanto a la final de la Asociación Regional de Criadores de Galgo Español, que se celebra durante el descanso de la Copa Zamora, la victoria fue para Cala, de Felipe Yeguas, que aprovechó un despiste de Cayetana, la galga de Lorenzo, para hacerse con el triunfo en este campeonato.