Por fin ha llegado, tras dos años de espera Pingüinos ha comenzado a rodar en Valladolid por trigésimo cuarto año, que se dice pronto. La Fiesta de la Moto intentó mantener el espíritu en 2016, tras los problemas que impidieron al Motoclub Turismoto organizar la pasada concentración, y este jueves por fin Valladolid puede decir que vuelve a tener la quedada motorista invernal más grande de Europa, donde se esperan más de 20.000 inscritos.

Los motores se han encendido a primera hora de este 12 de enero, día en el que se han abierto las inscripciones presenciales y en el que se ultiman los detalles a las instalaciones. Unas parcelas de la antigua hípica que han visitado el alcalde de Valladolid, Óscar Puente; del presidente de Turismoto, José Manuel Navas; y del presidente de la Asociación Provincial de Hosteleros de Valladolid, Jaime Fernández.

Como aseguraba el presidente de Turismoto, José Manuel Navas, se manejan unos pronósticos “fabulosos” de asistencia y de meteorología que hacen prever más de 20.000 participantes en los cuatro días de Pingüinos. “Tenemos todo preparado por si el número nos sobrepasa”, ha asegurado Navas, no obstante, afirma que no habrá ningún problema para “vivir estos cuatro días intensamente”.

A pesar de que en esta edición se rebaja en dos o tres hectáreas el terreno disponible comparado a Pingüinos pasados, el presidente de Turismoto ha asegurado que todo está mejor organizado. A diferencia de la Fiesta de la Moto del año pasado, llevada a cabo en las mismas instalaciones, se ha concentrado todo en la llamada Plaza Pingüinos. “Está todo diseñado perfectamente como si fuera un hotel, con sus zonas comunes y sus habitaciones”, ha relatado el representante de Turismoto.

Así, este año se dejará dar entrada a vehículos de cuatro ruedas que hagan de apoyo para llevar el equipaje de los moteros. “Muchos clubs vienen en moto deportivas y tienen problemas con equipaje y, aunque nosotros tenemos firmado un acuerdo con empresa de transporte para que traiga y lleven dicho equipaje, muchos optan por venir con un vehículo donde trasladan todo”, ha afirmado Navas.

Llegar más alto

Esta 34ª edición de Pingüinos cuenta con un presupuesto de 500.000 euros, de los que el Ayuntamiento pone 200.000 para su organización. Todo con la esperanza de que el reinicio de esta concentración motera lleve a alcanzar “cotas que no son conocidas hasta la fecha”, como ha afirmado Óscar Puente.

El alcalde ha expresado su “satisfacción y emoción” en un año en el que se esperan mejores expectativas que en la Fiesta de la Moto. “Por fin la concentración no será sucedáneo de nada, sino Pingüinos en estado puro”, algo para lo que el edil asegura que “hemos peleado”.

El regidor ha apelado a la unidad de todas las patas -Ayuntamiento, Turismoto y hoteleros y hosteleros- para recorrer un camino que “nos va a llevar a sitios que ni imaginábamos”. Puente considera que Pingüinos está “muy lejos de su cima”, por lo que ha pedido seguir “trabajando duro”.

Y es que esta quedada motera invernal es “magnífica” para el mundo de la moto pero también para la ciudad de Valladolid. Su retorno económico inmediato y el “posicionamiento a nivel mundial” hacen que el futuro sea “inimaginable”.

Por otro lado, el alcalde de Valladolid ha expresado la intención clara de que esta parcela de la antigua hípica sea la sede estable que lleve a Pingüinos a cotas más altas. “Es clave apostar por esta sede, la cual permite seguir implementando mejoras y ampliaciones a ambos lados”, ha asegurado.

Hoteles al 90%

Otro factor de importancia son los establecimientos hosteleros y hoteleros que se beneficiarán de los más de 20.000 asistentes esperados. Como ha afirmado Jaime Fernández, presidente de la Asociación de Hosteleros, se espera que este Pingüinos sea un “éxito total”.

Así, los hoteles de Valladolid estarían a un 90% de su capacidad durante estos cuatro días, además de los muchos y buenos restaurantes de Valladolid, también gran ciudad de la tapa.

Por otro lado, la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería ofrecerá este sábado una degustación de 4.000 raciones de lentejas de Tierra de Campos junto a una bebida para los inscritos en la concentración.