La Lotería de Navidad dejó este año una lluvia de millones de euros en la provincia de Salamanca, muy troceada, pero mucho dinero al fin y al cabo. Y es que se vendieron décimos del primer premio, el popular Gordo, además de un tercer y un quinto. Por eso, para el sorteo del Niño el Día de Reyes se ha desatado la fiebre en estos templos de la suerte.

Las colas más visibles están en la Ranita de la Suerte, en la calle Quinta, en la Rúa Mayor y en la calle San Pablo. La primera vendió un décimo del Gordo, las otras dos un quinto. Así, estas administraciones ubicadas en el casco histórico de Salamanca, con sus letreros de los premios bien visibles, están atrayendo a numerosos salmantinos y turistas. Y en el quiosco del paseo de Canalejas, único establecimiento que ha vendido décimos del Gordo las dos veces que ha pasado por la capital charra.

También hay ambiente continuo en Los Manolos, en el paseo del Rollo, una administración ya de por sí muy visitada porque constantemente reparte premios de todos los sorteos, ya sea Primitiva, Bonoloto, Euromillones, Lotería Nacional o Quiniela. Este año vendió un quinto premio.

Más a las afueras de Salamanca está la administración de la calle Maestro Jiménez del barrio San José, donde sus vecinos también están buscando la suerte estos día. Porque si no se tienta, es imposible que toque.

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