El Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social ha presentado los datos de interrupciones voluntarias de embarazo, es decir, de abortos, correspondientes a 2017. Cifras que muestran vuelven a repuntar, y es el segundo año que lo hacen tras un importante descenso como consecuencia de una nueva ley más restrictiva que aprobó el Gobierno del Partido Popular.

En concreto, el año pasado hubo 155 abortos en la provincia de Salamanca, una quincena más que el año anterior. No obstante, sólo dos fueron de menores de edad, una adolescente de 16 años y otra de 17. Principalmente fueron mujeres entre 20 y 30 años, con estudios iguales o superiores a la Enseñanza Secundaria, con ocho semanas o menos de gestación y siendo su primer aborto.

El gráfico adjunto muestra cómo el número de abortos en la provincia charra estaba en torno a los 200 hace una década, pero con la llegada del PP al Gobierno comenzaron a descender de forma paulatina casi hasta la mitad. Durante los dos últimos años han vuelto a repuntar.