En 1116 a buen seguro que la meteorología en los días de noviembre no distaba mucho de la actual. El otoño empezaría también a parecerse mucho al invierno en algunos momentos y la lluvia sería protagonista. Algo más de nueve siglos después, esas inclemencias meteorológicas han estado presentes en Fresno el Viejo, que durante este fin de semana ha recreado por cuarto año uno de los momentos de mayor relevancia en su historia.

El 11 de noviembre de aquél año, doña Urraca, reina de León y Castilla, donó la villa de Fresno el Viejo a la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén. Con esa efeméride como punto de partida, Fresno ha vuelto a abrir la puerta del tiempo a siglos pretéritos, en un viaje en el que han participado cientos de vecinos, ataviados con ropas inspiradas en la época y caracterizados para la ocasión.

El alcalde de Fresno, Luis Miguel Muñumer, ha explicado a NoticiasCyL que "la respuesta de la gente ha vuelto a ser muy positiva, el problema es que contra las inclemencias del tiempo no podemos hacer nada". La lluvia y el viento han impedido que se desarrolle el mercado medieval que otros años se colocaba en la plaza, así como a suspender prácticamente todas las actividades en el exterior, especialmente la programación del domingo, con el espectáculo de fuego y la despedida de la reina.

"Hemos adaptado el salón del Ayuntamiento para las actividades infantiles y los talleres, y hemos aprovechado la parte de la programación que se desarrolla en la iglesia de San Juan Bautista con una gran afluencia de público", ha explicado Muñumer.

Uno de esos actos ha sido la recreación histórica de lo acaecido en Fresno hace 902 años, con la novedad especial este año de la actuación de la soprano Paula Mendoza. "La verdad es que ha sido impresionante, la recreación impeclable, salió muy bien y con la actuación de Paula Mendoza estuvo aún mejor", ha apuntado el alcalde, uno de los principales promotores del nacimiento de esta teatralización en 2015.

El domingo, ante la imposibilidad de desarrollar las actividades en la plaza de toros, como el torneo medieval de caballeros a caballo o el combate mercenario, el momento álgido ha sido la misa medieval cantada en latín, también en la iglesia de San Juan Bautista; "ha sido una ceremonia muy especial, integrada en la recreación también aunque también sea de culto religioso", ha apuntado el alcalde de Fresno el Viejo.