La comunidad autónoma de Castilla y León registró un mes de octubre con un déficit de precipitaciones de en torno al 45 por ciento a pesar de las nevadas tempranas caídas en los últimos días en zonas de la meseta con espesores superiores a 30 centímetros en la Cordillera Cantábrica, según consta en el Avance Climatológico Mensual publicado por la Aemet y recogido por Europa Press.

La Aemet ha calificado el mes de octubre como "seco" o "muy seco" en la mayor parte de Castilla y León aunque en las provincias de Ávila y Segovia y en zonas del extremo norte llegó a ser "normal" e, incluso,
"húmedo" en el norte de Burgos.

La precipitación más baja correspondió a la zona de Aliste (Zamora) con 10 litros por metro cuadrado mientras que en el extremo Norte de Burgos (zona próxima al cántabro Valle del Pas) se registró el valor más alto, con 300 litros por metro cuadrado y el número de días de precipitación apreciable fue de 10.

En cuanto a las temperaturas, octubre tuvo carácter normal ya que, aunque las máximas se situaron de media por encima de su valor normal, con el "importante descenso" de las temperaturas diurnas entre los días 25 y 28 (16 grados) algunos valores diarios llegaron a estar "muy por debajo" de lo esperado, de tal forma que en los últimos días del mes prácticamente no se superaron los 10 grados y con valores inferiores a los 5 en zonas altas.

En Segovia, el día 28 se registró una temperatura máxima de 5,3 grados centígrados, el segundo valor más bajo para el mes de octubre en ese Observatorio, sólo superado por el registrado en 1974 (4,4 grados).

En el caso de Ávila el valor fue de 4,4 grados, también uno de los más bajos de dicho Observatorio, y el registro extremo se computó en Barriomartín (Soria), con 1,0 grados. Las temperaturas mínimas, por su parte, se mantuvieron por debajo de lo esperado durante gran parte del mes (primeros diez días y última semana), con un promedio de tres días de helada.

Se da la circunstancia de que el número de días de temperatura máxima
superior a 25 grados fue el doble de lo esperado para un mes de octubre y también lo fue, casi en la misma proporción, el número de días de helada. La temperatura máxima se registró el Candeleda (Ávila), con 32
grados el día 1 y la más baja el día 28 en Medina de Rioseco (Valladolid), con -5,4 grados, fecha en la que las heladas fueron prácticamente de carácter generalizado y con una temperatura media de 2,7 grados.