No se trata de fotogramas de la película ‘Los Pájaros’ de Alfred Hitchcock ni tampoco de algún filme de serie B para las sobremesas de los fines de semana. En La Fuente de San Esteban sus vecinos han podido grabar múltiples vídeos de una plaga de estorninos que les mantiene en jaque desde hace un mes. “Acojona”, llegan a decir algunos. “Estamos hartos. No hay quien descanse con estos pájaros”, añaden otros, incluso solicitando permiso para poder cazarlos a tiros.

El Ayuntamiento de este municipio del Campo Charro ha puesto en marcha una serie de medidas acústicas y luminosas que están comenzando a dar resultado, ahuyentando a los pájaros al ver rota su comodidad. De hecho, durante los últimos días ya se ven menos excrementos en las calles y el ruido es menor al reducirse la presencia de estorninos, que llegaron a contabilizarse en número de treinta mil.

En Terradillos, las urbanizaciones de Los Cisnes y de El Encinar son las más afectadas por la plaga de palomas. Las aves incluso se refugian en los balcones de las viviendas no habitadas, donde anidan y también mueren, “con las consecuencias fatales que esto supone tanto para la salud como para el patrimonio de los vecinos”. Cabe recordar que las palomas son portadoras de numerosas enfermedades infecciosas y sus plumas y excrementos alojan parásitos, bacterias y hongos, una situación que supone un grave problema sanitario.

Por el momento desde el Ayuntamiento no se han adoptado medidas al respecto y el problema se ha convertido en tema de enfrentamiento político entre equipo de gobierno y oposición. En el caso de las palomas la solución no es tan fácil como en los estorninos, pues hay que combinar una serie de medidas en la que hay que concienciar también a la población.