Nacho Martín ha sido prácticamente visto y no visto como jugador del Ciudad de Valladolid. El ala-pívot llegó al conjunto de Paco García con las cartas boca arriba, primero para entrenar y mantenerse en forma y después para ayudar al equipo en lo posible en la competición mientras seguía su espera de una oferta más potente. Y así ha sido.

Tras el papel de Martín ante Huesca en la victoria el pasado viernes en Pisuerga (7 puntos y 5 rebotes en 16 minutos) y la ilusión despertada en la afición, el jugador abandona la disciplina del club con palabras de agradecimiento mutuo.

Ahora terminará la temporada en el tercer clasificado de LEB Oro, Manresa, con 13 victorias y 5 derrotas, tres partidos por encima en la clasificación del CBC Valladolid, que continúa sexto y con buenas perspectivas de disputar el playoff de ascenso.