El Gobierno acaba de difundir el ‘Boletín estadístico del personal al servicio de las Administraciones Públicas’, actualizado a julio de 2017, que muestra que la plantilla de funcionarios se recupera ligeramente en la provincia de Salamanca pero sólo ocho de cada cien puestos de trabajo perdidos durante la crisis.

En concreto, hay 23.402 empleados públicos, dos mil menos que antes de estallar la recesión económica, trescientos más que a comienzos de año pero cuatrocientos menos que el ejercicio anterior. Como puede apreciarse en el gráfico adjunto, el inicio de la recesión no se notó en las plantillas de funcionarios, que se dispararon hasta 2010, pero entonces vino un drástico recorte del que no terminan de recuperarse las administraciones públicas, sobre todo por la nula tasa de reposición de las jubilaciones.

En concreto, en Salamanca hay 4.703 trabajadores dependientes del Gobierno (casi doscientos menos que el semestre anterior), 10.915 de la Junta de Castilla y León (nueve menos), 4.825 de ayuntamientos (cuatrocientos más) y 2.959 de la Universidad de Salamanca (setenta más).

En lo que respecta al Gobierno, 1.440 son trabajadores de ministerios (medio centenar menos), 959 de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (un centenar menos), 1.577 de las Fuerzas Armadas (siete menos) y 448 de Juzgados (siete más).

De la Junta de Castilla y León, 1.905 dependen de consejerías (nueve más), 4.020 de educación no universitaria (siete menos) y 4.990 de hospitales y centros de salud (once menos).

En lo que respecta a la Universidad de Salamanca, 2.021 son Personal Docente e Investigador (PDI) y 938 son Personal de Administración y Servicios (PAS), aumentando la plantilla en ambas categorías respecto a comienzos del año 2017.