Además, hay que subrayar la importante labor de las hermandades de donantes de sangre para la promoción y desarrollo de las colectas. Este año, hay que destacar también la buena acogida que han tenido entre los castellanos y leoneses las iniciativas presentadas por el Centro en el periodo navideño. Su participación ha permitido afrontar estas fechas con total tranquilidad.

Por provincias, las donaciones del año pasado se han distribuido de la siguiente manera: 4.916, en Ávila; 20.313, en Burgos; 15.584, en León; 6.352, en Palencia; 13.579, en Salamanca; 6.650, en Segovia; 4.107, en Soria; 26.371, en Valladolid, y 4.753, en Zamora.

Hay que indicar que, del total de donaciones en la Comunidad, 4.633 han sido de aféresis de plaquetas y plasma. Ésta es una forma diferente de donación en la que se recoge un pequeño volumen de sangre para separar de él el elemento necesario -plaquetas o plasma, en este caso- y, después, restituir el resto de componentes al donante. Esto permite una mayor frecuencia de donación que con el proceso convencional, ya que mantiene estable la cifra de glóbulos rojos de la persona que dona.

Por todo esto, el Centro de Hemoterapia y Hemodonación tiene un papel fundamental dentro del Sistema de Salud de Castilla y León. Y, desde su creación, ha mantenido su compromiso con la misión de garantizar la suficiencia de componentes para transfusión a todos los pacientes, manteniendo altos niveles de calidad en los productos sanguíneos y protegiendo la seguridad tanto de los donantes como de los receptores.

Finalmente, hay que destacar que la implicación de los ciudadanos con esta causa solidaria cada vez es mayor. En 2017 esto se ha podido observar, por ejemplo, en los buenos resultados obtenidos en la campaña de donación a lo largo del año en las universidades de la Comunidad. En los distintos centros docentes se han acercado a donar 2.601 personas -estudiantes, profesores, personal auxiliar…-. Esto es un 9 % más que en la misma campaña de 2016 y, además, un 43 % del total son donantes nuevos.