Inés Arrimadas, candidata de Ciudadanos por Barcelona al Congreso de los Diputados, se ha dejado caer este miércoles por Salamanca. La hasta ahora líder de la oposición en el Parlamento autonómico catalán ha paseado por las calles del centro compartiendo impresiones con los simpatizantes y haciéndose fotografías con los transeúntes. Arrimadas ha degustado el 'tapeo' charro y se ha dirigido en comitiva hasta la plaza de Anaya, donde se ha dirigido a los votantes desde un micrófono de pie que ha ubicado el partido.

Una vez allí, Arrimadas ha cargado contra el candidato socialista Pedro Sánchez del que ha dicho que es "un peligro público" que, con sus decisiones ante los debates, pone de manifiesto que "se esconde" para "no dar la cara" sobre qué nuevas competencias va a dar a Cataluña o sobre si pretende "conceder indultos" a los independentistas en el caso de ser declarados culpables. A su vez, tendía la mano al Partido Popular para desalojar al socialista de la Moncloa.

En otro orden de asuntos, ha zanjado el espinoso tema de las polémicas elecciones primarias de Castilla y León que culminaron con la revelación de un 'pucherazo' que está aún por explicar. “Hubo unas primarias, se detectó un error, se solucionó en 24 horas y hoy tenemos un candidato votado por las bases", ha añadido en el encuentro donde ha estado acompañada, entre otros, por el ganador de ese proceso interno, Francisco Igea.

Sobre su proyecto en el territorio de Castilla y León, Arrimadas ha lamentado que haya "una España de primera y una España de segunda" y "diferencias entre las oportunidades y los servicios si vives en una gran ciudad o si vives en un pueblo pequeñito". Sobre estos municipios con menos población, la portavoz de Ciudadanos ha puesto como ejemplo el de sus padres, que no es otro que el salmantino municipio de Salmoral.