El Índice General de Producción Industrial (IPI) aumentó un 0,3 por ciento en Castilla y León el pasado mes de febrero en relación al mismo mes de 2018, frente a un descenso del 0,2 por ciento en el resto del país que registra en este caso una tasa 2,2 puntos inferior a la de enero, según ha informado este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se trata del octavo mejor dato del país en la evolución del IPI que aumentó precisamente en ocho comunidades autónomas lideradas por Castilla-La Mancha (5,1) por lo que la comunidad castellanoleonesa registra el menor incremento. Por su parte, la tasa anual de la producción industrial cayó en las nueve comunidades restantes con especial incidencia en este caso en Extremadura (-6,8 por ciento).

En lo que va de año, la producción industrial ha aumentado un 1,7 por ciento en Castilla y León, de nuevo por encima de la media nacional que ha crecido un 0,9 por ciento. Castilla y León consigue en este caso la séptima mejor evolución junto con Andalucía y País Vasco.

A nivel nacional, con el retroceso interanual de enero, la producción industrial regresa a tasas negativas después de haber subido un 2 por ciento en enero.

En tasa mensual (febrero sobre enero), la producción industrial se desplomó un 1,1 por ciento eliminando los efectos estacionales y de calendario, en contraste con el fuerte repunte mensual del 3,6 por ciento que se experimentó en enero.

Por sectores industriales, la producción bajó en energía (-6,2%), bienes de consumo duradero (-1,8%) y bienes intermedios (-0,3%), mientras que subió en bienes de equipo (+3,4%) y bienes de consumo no duradero (+1,8%).

Corregida de efectos estacionales y de calendario, la producción industrial descendió un 0,3% respecto a febrero de 2018, tasa tres puntos inferior a la de enero.

Los índices corregidos de efectos estacionales y de calendario también presentaron tasas anuales negativas en energía (-6,1%), bienes de consumo duradero (-2,4%) y bienes intermedios (-0,5%). Por contra, la producción aumentó en bienes de equipo (+3,4%) y en bienes de consumo no duradero (+1,3%).

En tasa mensual (febrero sobre enero), la producción industrial se desplomó un 1,1% eliminando los efectos estacionales y de calendario, en contraste con el fuerte repunte mensual del 3,6% que se experimentó en enero.

Todos los sectores presentaron caídas mensuales en la producción. La energía se anotó el mayor descenso, un 3,7%, seguido de los bienes de equipo (-0,6%), los bienes de consumo duradero y los bienes intermedios (-0,4% en ambos casos) y de los bienes de consumo no duradero (-0,3%).