Las ermita del Cristo de Morales perdía hoy a su cuidador más entregado. El señor Juan, conocido por ser el ermitaño del templo de Morales del Vino fallecía a los 96 años, tras una vida dedicada a su mantenimiento y custodia.

Juan Bautista Moro González era un hombre muy querido por los vecinos de la localidad y de los devotos del Cristo de Morales, gracias a su entera dedicación a la ermita. Este hombre había sido el encargado, entre otras muchas tareas diarias, de plantar los árboles que a día de hoy dan sombra a la venerada iglesia, donde se celebra una de las romerías más multitudinarias el 9 de mayo de cada año.

La ermita del Cristo de Morales es una de las más importantes de la provincia, que este amable ermitaño cuidaba con esmero y cariño tal, que el párroco del municipio, José Alberto Sutil no ha podido evitar mostrar su tristeza y emoción tras conocer su fallecimiento. Por ello, ha querido tener estas palabras de recuerdo y agradecimiento para él: "Anoche se durmió el señor Juan, ermitaño del Cristo de Morales. Se habrá encontrado por fin con el Cristo al que tanto amó y cuidó. Descanse en paz".

Al igual que el sacerdote, vecinos y conocidos de la ermita han manifestado su recuerdo y cariño a la figura del ermitaño, y de sus familiares que se despedían de él hoy en la iglesia parroquial de La Asunción de Morales del Vino.