Burgos

El Arzobispo de Burgos lamenta la "tergiversación" de sus palabras y recuerda que condena toda violencia

16 julio, 2019 00:16

El arzobispo de Burgos, Fidel Herráez Vegas, ha lamentado que se hayan "tergiversado" sus palabras sobre "la actitud heroica de una joven, Marta Obregón, que murió por defender su castidad", y ha añadido que siempre ha condenado toda violencia que se ejerce contra las mujeres por el hecho de serlo.

En una nota enviada a Europa Press, el Arzobispo reaccionaba así ante lo que considera una "tergiversación" de un escrito suyo que acompañaba la documentación de una causa de la beatificación, en el que se evidenciaba la actitud heroica de Marta Obregón, "una joven que murió por defender su castidad". Esta joven fue violada y asesinada en 1992 por el 'violador del ascensor'.

"Me solidarizo con todas las personas que son víctimas de todo tipo de violencia y respaldo el trabajo de los grupos que en nuestra sociedad están colaborando por revertir y sanar esta situación. Así lo he hecho siempre a lo largo de mis intervenciones públicas y de mis encuentros con asociaciones y colectivos que desarrollan su actividad en este ámbito. Esto es lo que siento, pienso y digo. Nada más lejos de lo que se me atribuye en lo publicado en algunos medios con tanta y total falsedad", indica el Arzobispo en la nota.

Herráez señala que "es lamentable que, en una sociedad democrática, que se fundamenta en el respeto a la dignidad de las personas, una mujer tenga que llegar a anteponer incluso su vida por la defensa de su propia integridad, como lo hizo Marta Obregón".

El Arzobispo asegura que vive con "dolor" las noticias de los últimos días de las agresiones sexuales contra las mujeres, "cada vez más habituales", y se une al pensamiento del Papa Francisco cuando pide que "ante el flagelo del abuso físico y psicológico causado a las mujeres, es urgente volver a encontrar formas de relaciones justas y equilibradas, basadas en el respeto y el reconocimiento mutuos".

En un párrafo del mensaje del Arzobispo por la causa de beatificación de la joven, el arzobispo señalaba que "Marta también es un estímulo para vivir todas las virtudes cristianas que ella fue descubriendo: la alegría, el servicio, la entrega... Pero, en especial, la grandeza de la castidad, como se hace visible cuando resiste y lucha hasta morir asesinada por defenderla. Una virtud hoy poco valorada, que nos ayuda a orientar el amor y la entrega hacia su plenitud y belleza más singular".