El Club Deportivo Guijuelo no pudo acabar con buen sabor de boca su participación del Grupo 1 de la Segunda División B tras caer ante el Internacional de Madrid (2-1). El conjunto chacinero nada se jugada y sucumbió ante la necesidad de un cuadro capitalino que ocupaba la plaza de playout. Tras su victoria sigue siendo equipo de la categoría y condena a jugares las habichuelas al Celta de Vigo B.

El Inter puso las cartas boca arriba nada más abrirse la partida. En el primer minuto de juego, un córner peinado hacia el segundo palo sirvió a Ariel para adelantar a los locales. Sin lugar a la especulación. Las urgencias se trasladaban a Vigo donde el Celta y los vecinos guijuelenses del Salamanca UDS se jugaban el pan. Además, el Inter siguió apretando en busca del segundo y en sucesivas ocasiones probaron los guantes de Zarco. El Guijuelo no se estiró hasta pasado el minuto diez cuando Javi Borrego encontró a Ten Den en el interior del área pero el remate del holandés se marchó por encima del larguero.

El conjunto chacinero se fue sacudiendo la presión local y disputó de una nueva ocasión al paso por el 20' en los pies de Javi Borrego. Reaccionó a tiempo el meta madrileño enviando a córner. Espina, al filo de la media volvió a avisar de las intenciones visitantes. Que no eran otras que igualar el dueño y tratar de llevárselo. Poco después, Juanra sacó un pase de la muerte que sonaba a fanfarrias por todo lo alto. Rubén a punto estuvo de atinar una volea en el área y el sprint final fue para los locales, gol anulado incluido.

El segundo acto comenzó como acabó el primero. Con ocasiones para un Inter de Madrid sabedor de que jugaba sin red. A los poco minutos, Razvan tuvo que abandonar el terreno de juego por lesión y en su lugar entró Raúl Ruiz. El lateral sería importante a los pocos minutos de ingresar al encargarse de transformar un penalti sobre Javi Borrego que ponía las tablas en el marcador. Susto generalizado en la grada de un campo que veía cómo su equipo, merecedor de mejor suerte, era carne de playout.

Así que el Inter se fue a por el partido y, de primeras, una gran actuación de Zarco y la madera, evitaron que lo echara al zurrón. Sin embargo, el cántaro fue tanto a la fuente que se rompió en el minuto 87 con un soberbio tanto de espuela de Fran Cortés que hizo enloquecer a la grada local, invasión del banquillo incluida, y, dicho sea de paso, justicia a lo visto sobre el terreno de juego. El Inter se salva y el Guijuelo pone el lazo a una notable temporada.