El presidente de la Junta de castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha afirmado que el Ejecutivo autonómico lleva el "equilibrio territorial" en todas sus políticas y ha asegurado que el Gobierno, con él al frente, estará "en todos los rincones" de la Comunidad.

Fernández Mañueco se ha expresado así en el Pleno de las Cortes en respuesta al procurador de UPL, Luis Mariano Santos Reyero, quien ha intervenido como encargado del Grupo Mixto para preguntar al presidente sobre las medidas que piensa poner en marcha para eliminar los desequilibrios territoriales de la Junta.

En este marco, el presidente de la Junta ha abogado por el diálogo político e institucional, con ayuntamientos y diputaciones, además de con el Consejo Comarcal de El Bierzo en León, pero aún así ha destacado que la búsqueda del equilibrio territorial está "en todas las políticas" del Gobierno autonómico.

En esta línea, ha agregado que la Junta, con él al frente, estará "en todos los rincones" de la Comunidad, también en la provincia de León, en referencia a las alusiones del procurador leonesista.

Fernández Mañueco se ha referido a "hechos concretos" para luchar contra los desequilibrios territoriales, que pasan por la apuesta por el mundo rural, los regadíos, la banda ancha, el transporte público, la fiscalidad en el medio rural o el Diálogo Social y garantizar la prestación de servicios públicos en todo el territorio, lo que es una "prioridad".

Pero además ha señalado que para las búsqueda del equilibrio también se trata de defender los intereses generales de la Comunidad en cuestiones como la Política Agrícola Comunitaria (PAC), la exigencia de infraestructuras como las autovías, el AVE o el tren convencional o de una financiación autonómica y local adecuada.

En el caso concreto de León, ha criticado que parezca que Santos Reyero va "de vez en cuando" porque la Junta sí que apuesta por sectores industriales punteros que se localizan en la provincia como el agroalimentario, el químico farmacéutico o la ciberseguridad.

"¿Dónde vive?", ha preguntado al procurador de la UPL, tras lo que ha añadido que la lucha contra los desequilibrios territoriales a los que se ha referido también es apostar por el tejido industrial.

Apoyos a la industria 

Así, ha recordado que en agosto de 2018 se informó del cierre de Vestas y hoy hay una alternativa industrial que garantiza los puestos de trabajo, lo que es una "realidad", pero además considera que "equilibran" planes de fomento industrial como los dos que hay en León, uno en las cuencas mineras y otro en Villadangos, los cuales se suman a otros en otras zonas de la Comunidad y ha afirmado que se seguirá trabajando en esa línea.

Por su parte, Luis Mariano Santos ha criticado que con el nuevo gobierno más que afrontar los problemas se tengan "ocurrencias" y más altos cargos, buen trato a los cargos de confianza o no se cumpla el Diálogo Social o se tengan políticas de lucha contra la despoblación "bastante nefastas".

A todo eso ha sumado el "debate" orquestado de la capitalidad de la Comunidad, al que ha afirmado que contribuyen el PP y PSOE con direcciones autonómicas que no se pronuncian y considera que es una "falta de respeto" de políticas que alimentan el debate territorial para un rédito político.

El verdadero debate, ha señalado, es por qué nadie hace nada contra la despoblación y por qué nadie "levantó la voz" cuando se centralizó en Valladolid el 112, las Cortes, etcétera.

Así, cree que lo "verdaderamente humillante" no es que el alcalde de Valladolid, el socialista Óscar Puente, y la número uno del PP en el Ayuntamiento vallisoletano, Pilar del Olmo, pidan la capitalidad, sino que lo "duro" es que quien ha centralizado todo pida también la "centralización" de inversiones en los territorios más ricos, algo que ha comparado con que Amancio Ortega pidiera fondos públicos para fortalecer su negocio.

De esta forma, ha censurado que no haya medidas para cambiar esta tendencia centralizadora e inversora "desequilibrante", por lo que ha pedido que se "aporte luz" sobre esta cuestión y que no ocurra como con la Fundación Villalar, "un ente abstracto para repartir dinero entre "amiguetes fieles".